Difusión del conocimiento de las ciencias médicas

07/11/2021

Economía de la salud

Por Prof. Dr. Juan Carlos Ponce

. Lectura de 4 minutos

Existe una relación directa entre un sistema de salud eficiente y el bienestar económico de un país. La riqueza y la pobreza dependen de la salud de su población.

La salud de la población incide directamente en el desarrollo económico de los países en forma rotunda ya que condiciona la creación de la riqueza e impacta fuertemente en su horizonte socioeconómico.

A continuación, analizaremos algunos aspectos que determinan si un país le espera un futuro de riqueza o uno de pobreza.

Capital humano: La prevención y no en la mejora de la salud, evita problemas de desnutrición infantil y malformaciones neuronales generadas por la falta de una alimentación racional en los primeros años de vida, condicionando su educación, capacitación laboral, desarrollo físico y cognitivo.

Capital corporativo: La falta de desarrollo del sistema de salud robusto en prevención y falta de asistencia en los determinantes de la salud como son la alimentación, el agua potable, sustento económico y desarrollo educativo, tiene un impacto en la organización de la fuerza laboral ya que las empresas no consiguen recursos humanos con la capacitación necesaria, condicionando las oportunidades de inversiones, y las posibilidades de  atraer trabajo y capital.

Es indudable que existe una importante relación entre la relación entre la salud y el desarrollo económico de los países.

La mayor parte de los estudios examinan el estado de la salud en áreas de altos rangos de mortalidad y su relación con el desarrollo económico.

Este círculo vicioso afecta también los siguientes aspectos:

-Condiciona sustantivamente el conocimiento de las ciencias.

– Se limita el desarrollo de nuevas tecnologías en el campo de la producción condicionando la productividad.

– Dificulta la aplicación de procesos innovadores en la economía nacional.

– Imposibilita la capacidad de lograr integrarse industrialmente con la tecnología extranjera, restringiendo la posibilidad de asociarse económica y educativamente con el mundo desarrollado.

Es evidente el impacto que tiene la no salud en la economía de un país ya que limita fuertemente el desarrollo económico de toda la población generando un ciclo de estancamiento social.

Ahora bien, pongamos la mirada en alguno de los beneficios del desarrollo de una salud robusta en la población y analicemos como contribuyen a generar un circulo virtuoso en la economía:

  • Se logra una más rápida transición demográfica, lo que significa, el paso de un régimen demográfico pre-industrial ( con altas tasas de mortalidad y baja expectativa de vida) y de natalidad) a otro industrial,  con incremento de la población y significativas bajas de mortalidad y natalidad.

Las sociedades con altos rangos de morbilidad tienden a  tener dificultad para el progreso económico.

  • Desde lo educacional, se logra un crecimiento en la tasa de alfabetización, mejora el desempeño educacional aumentando la calidad y el nivel de la capacitación,
  • Incrementa los ahorros familiares y la productividad laboral,
  • Mejora la estabilidad social y económica.

También es interesante resaltar, que, por lo general, los pobres no buscan atención médica como resultado de la carencia de recursos y/o coberturas sanitarias.

Existe un fenómeno con referencia a aquellas personas que tienen garantizado un buen plan de salud, este fenómeno “sicológico” hace que sean más propensos a invertir en educación, actividades de recreación y deportivas que a su vez mantiene su salud.

Por el contrario, una situación precaria de salud se traduce en altos costos médicos que los indigentes no pueden pagar y generándole en muchísimos casos la necesidad de endeudarse, lo cual empeora su situación económica y su salud, tanto física como mental.

Las experiencias en países desarrollados indican que los países con mejor desempeño económico han invertido más en salud.

Algunos de los grandes booms de la historia económica fueron generalmente precedidos por un importante progreso en la salud pública, generándose una corriente de inversión hacia ese sector y un fuerte desarrollo en la calidad de la nutrición de la población mejorando su calidad de vida.

De esta forma, la inversión en salud pública, fue un requisito y no una consecuencia del crecimiento económico en los países más exitosos.

La inversión en salud debe ser considerada tanto como un elemento de prevención de la mortalidad como un estímulo para el crecimiento económico, además  es un mecanismo para estimular o proteger el desarrollo económico y reducir la pobreza.

Un pueblo sano sirve de motor para el crecimiento.

La esperanza de vida está significativamente correlacionada con el posterior crecimiento económico.

El Círculo Horwitz explica cómo el proceso entre la salud y la enfermedad está atravesado por el contexto en el que las personas vivimos.

Fuentes:

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