Con inflamación del periostio por uso excesivo (Overuse injury) micro traumática repetida de las extremidades inferiores que afecta a una gran proporción de atletas.
Se produce más frecuentemente en actividades de carreras y saltos.
La fisiopatología es la misma que se genera en todas las lesiones por sobre uso o sobre entrenamiento. Los factores desencadenantes (extrínsecos) actúan sobre los predisponentes (intrínsecos).
Consiste en un aumento acelerado, desproporcionado y desprogramado de cargas cíclicas (aumento en la frecuencia, intensidad o volumen de cargas como así también una disminución en las pausas o descanso reparador) que actúan sobre factores propios del deportista como aumento de pronación de pie, tibias varas, anteversión femoral y trastornos rotacionales de caderas.
Además, las asimetrías, los desbalances musculares, la disminución de la flexibilidad y la limitación del rango de movilidad articular, conllevan a producir una mala mecánica o mala técnica de ejecución del movimiento.
Otros de los factores interviniente son el tipo de calzado y las superficies o terrenos de entrenamiento.
Estos atletas presentan un cuadro característico. Al antecedente de aumento de cargas y sobre los factores biomecánicos y funcionales mencionados experimentan dolor en piernas, generalmente en la mitad y tercio inferior de pierna, sobre la cara posteromedial de la tibia.
Este dolor es palpatorio, y percutorio a lo largo de todo el trayecto tibial, es el único dato del examen clínico.
En su relato manifiestan la intensidad y cronología del mismo, ya que el cuadro generalmente progresivo muestra un patrón característico que se presenta en etapas:
Al principio es un dolor al inicio de la actividad que luego va cediendo con la actividad para luego tener menor tiempo sin dolor, hasta que finalmente se manifiesta a lo largo de toda la actividad obligando al paciente a abandonar su práctica deportiva.
De hecho, muchos atletas continúan con la actividad utilizando analgésicos, lo cual agrava la sobrecarga y el cuadro, pudiendo llevar en estos casos al siguiente estadio de este espectro que es la fractura por estrés de tibia.
Si bien el diagnóstico es clínico obteniendo el antecedente, la ausencia de trauma, el examen biomecánico y funcional, es de buena praxis solicitar estudios de imágenes (radiografías y resonancia magnética) para realizar el diagnóstico diferencial con la fractura por estrés y aunque infrecuentes patología no traumática de presentación clínica y topográfica similar como son algunos tumores e infecciones óseas.
Si bien en medicina deportiva lo que debe primar es la prevención primaria, la detección temprana de factores intrínsecos, las periodizaciones, el control de terrenos de juego y otras variables, cuando no realizamos el diagnostico de esta entidad debemos focalizarnos en la prevención secundaria.
Consiste en aliviar el dolor, mantener la forma atlética y focalizar en corregir, balancear o contrarrestar los factores fisiopatológicos intervinientes.
El alivio del dolor consiste simplemente en retirar el impacto. De esta manera el paciente puede someterse a una serie de trabajos fisiokinésicos de readaptación, mejora el gesto técnico, reacondicionamiento funcional y mantenimiento de estado aeróbico anaeróbico con otras modalidades como el gimnasio, natación o Pilates para mantener su estado y evitar así también la fatiga neuromuscular.
No menos importante es el uso de plantillas ortésicas, vendajes funcionales como contrarrestar factores posturales o biomecánicos.
De esta manera el atleta comienza en forma paulatina y progresiva el aumento de cargas en impacto para lograr adaptaciones que lo ubique nuevamente en su actividad habitual (return to play/exercise).
En casos refractarios, recalcitrantes o recurrencias la aplicación de sesiones de ondas de choques focales puede ser un complemento beneficioso debido a sus buenos resultados, método no invasivo y no doloroso de aplicación.
En resumen, la periostitis de tibia es una entidad dolorosa e incapacitante que se genera por un mal abordaje en las cargas del deportista por tanto es imprescindible la detección temprana de factores predisponentes y una periodización adecuada para que las cargas no terminen en esta patología que interrumpe la actividad del deportista.