Los más importantes sobre el desarrollo motor son la plasticidad del sistema nervioso y sus interconexiones es decir “sinaptogenesis”. Estos aspectos nos permitirán entender con mayor profundidad el valor de las etapas sensibles de la coordinación.
La coordinación, como la interacción cooperativa del Sistema Nervioso y musculo-esquelético, desempeña un papel decisivo en el desarrollo motor desde las edades más tempranas.
Para comprender estos mecanismos debemos analizar el proceso evolutivo desde la etapa intrauterina hasta la extrauterina. En la etapa intrauterina el feto adquiere 250.000 neuronas por minuto, al nacer posee ya casi todas las neuronas, pero las redes interneuronales no están maduras.
Alrededor de 100.000 millones de neuronas en el cerebro humano se comunican entre sí gracias a unos 100 billones de interconexiones. El cerebro coordina con precisión la tensión, contracción y relajación de más de 600 músculos de todo el cuerpo.
El sistema motor se caracteriza tanto por su organización jerárquica como por su funcionamiento en paralelo.
Las vías piramidales y estructuras cerebrales más profundas ejecutan el programa motriz desarrollado por la corteza cerebral, y llegan al sistema musculo esquelético por las vías nerviosas motoras de la medula espinal.
De este modo, los músculos pueden ejecutar actividades concretas sustentadas en procesos nerviosos de activación e inhibición. Esto se logra por medio de dos mecanismos: regulador y de control. (Bernstein).
El S.N.C. está compuesto por una sustancia blanca y una gris.La sustancia blanca se relaciona con la mielina, envoltorio lipídico que permite aumentar la velocidad de conducción nerviosa y la precisión del estímulo.
La sustancia gris corresponde a los somas neuronales y dendritas no mielinizadas conjuntamente con las células gliales. En el cerebro la sustancia gris se dispone en su superficie y forma la corteza.
Al aprender, nuestro encéfalo cambia. Esta modificación no afecta solo la materia gris sino también la sustancia blanca, encargada del flujo de la información (mielina).
El proceso de aprender descansa en nuestro cerebro, En primer lugar, en la transformación de la comunicación entre dos neuronas (sinapsis), y en segundo lugar en modificaciones del proceso de la información.
En base a esto, podemos decir que el cerebro no constituye una estructura estática, sino que se adapta sin cesar a las condiciones de su entorno, esto significa:
Plasticidad, capacidad del sistema nervioso para cambiar y modificarse ante diferentes estímulos se la denomina PLASTICIDAD NEURAL O CEREBRAL, y esto es muy notable durante el desarrollo, pero subsisten en la edad adulta para asegurar la adaptación del individuo. Esta PLASTICIDAD SINÁPTICA constituye la base del aprendizaje, la memoria y otras adaptaciones.
Desde el inicio de su existencia hasta la muerte, los seres humanos perciben, codifican y almacenan experiencias provenientes de un entorno que construyen con imágenes, sonidos, olores, sabores y sensaciones táctiles.
Con asombroso dinamismo, el aparato cognitivo percibe, integra y responde a esos estímulos.
La Plasticidad es una de las características distintivas del sistema nervioso. Estos conceptos que nos aporta la NEUROCIENCIA son muy importantes para la pedagogía del movimiento.
¿Cúando enseñamos motricidad que debemos enseñar?
La respuesta es muy amplia pero en un planteo general debemos enseñar, ajustes perceptivos espaciales temporales, motricidades básicas espontáneas y motricidades específicas adquiridas, ejercicios con prioridad en fuerza, elongación y resistencia, y pensamientos tácticos.
Debemos entender que todos estos conocimientos provienen de la neurociencia para comprender profundamente el Aprendizaje Motor y el Control Motor.
Cuando un sujeto aprende una nueva habilidad motora, también aprende de cuáles son los cambios perceptivos que acompañan a los movimientos que efectúa la persona, y la continuidad de estos cambios (es decir, el feedback sensorial concurrente a la acción) es fundamental en el propio proceso de desarrollo de la habilidad motora.
La mejor comprensión del proceso, implica conocer las Etapas del aprendizaje motor, tratadas en forma independiente.