Nuestro cuerpo está formado entre un 60 y 70 % por agua.
Perdemos entre 2 y 3 litros a través del sudor, la respiración, la orina, y las heces. Es necesario reponer esas pérdidas.
Hidratarse significa incorporar la cantidad adecuada de agua para que el cuerpo funcione normalmente : 8 vasos de agua segura por día, especialmente antes, durante y después de actividad física.
El primer lugar del tipo de bebida que consume nuestra población son las gaseosas comunes, el segundo lugar lo ocupan los jugos listos para beber/concentrados y el tercer lugar las aguas saborizadas, gaseosas light, bebidas hidratantes y energizantes.
Es importante el consumo de mate, té y café con azúcar, con un aporte de energía extra.
Desde la infancia, debe ser ofrecida siempre primero.
¨Lo más sano es beber agua¨
Estamos lejos de un hábito saludable, no priorizamos el consumo de agua segura para beber e hidratarse.
Obstáculos en la accesibilidad:
1) Falta de agua segura en red para la población en general; bebederos en las plazas escuelas y espacios públicos.
2) Desconocimiento de cómo potabilizar el agua, remplazándola por aguas envasadas.
3) En cumpleaños y fiestas, ofrecer jarras de agua segura; en las escuelas, debe haber al alcance de los niños en todo momento y se debe promover el uso de envases de transporte para las mochilas y las carteras, evitando la compra de otras bebidas en el trayecto desde y hacia.
4) La falta de sabor se resuelve agregándole frutas exprimidas, por ejemplo limón, naranja, mandarina, pomelo u otras, sin azúcar.
Grupos especiales:
Embarazadas: el agua mantiene el liqquido amniótico que es el que rodea y protege al bebe
Madres lactantes: se debe beber más aguas por las pérdidas que se producen al amamantar.
Bebés: pueden empezar a tomarla a partir de los seis meses, antes es de preferencia la leche materna.
Adultos mayores. Disminuyen el consumo de líquidos porque tienen una menor sensación de sed.
Niños. Son más activos, transpiran mas, y perciben menos la sed por estar entretenidos.
Calidad del agua: potabilización
Si se sospecha de su calidad, se puede utilizar métodos caseros para potabilizarla.
- Colocar 2 gotas de lavandina ( concentrada 60gr/l) por cada litro de agua y dejarla reposar 30 minutos antes de consumirla.
- Hervir el agua durante 3 minutos y esperar a que se enfríe para beberla. NO volver a hervir.
Con ambas opciones se elimina cualquier bacteria nociva.
Si el agua estuviera muy sucia antes de potabiliza se deber filtrar a través de un tela limpia, quitándole las impurezas visibles. No elimina otro tipo de contaminante como las sustancias químicas.
Recipientes de acarreo:
- Deben ser de plástico, transparentes y con tapa.
- Los baldes deben ser higienizados periódicamente con agua segura y jabón, y tener tapa para evitar su contaminación.
- No se deben utilizar envases de agroquímicos.
Almacenamiento:
- Los recipientes de almacenamiento deben estar siempre tapados y/o con grifos.
- Para sacar el agua, si no tienen grifo, utilizar cucharones o tazas limpias
- Deben ubicarse en lugares frescos sobre un base firme y alejada de animales.
- No utilizar recipientes que anteriormente hayan contenido plaguicidas y/u otros venenos.
- Lavar frecuentemente con agua y cloro los recientes que se utilizan.
Es muy importante desinfectar periódicamente cada seis meses los tanques de agua.