Esta droga está en su mayoría en las calles de Estados Unidos y Europa.
Se le conoce como la droga «Frankenstein», debido a que se puede modificar su composición para crear efectos diversos en los consumidores.
Sus efectos son similares a los de la morfina, la oxicodona, la heroína y el fentanilo, pero su potencia es muy superior.
Según las pruebas de laboratorio, algunos de ellos serían entre cientos y miles de veces más potentes que la morfina y entre 10 y 40 más que el fentanilo.
Los nitazenos son un grupo de opioides sintéticos que han aparecido en los últimos años. Son análogos de las sustancias sometidas a fiscalización internacional clonitazeno y etonitazeno.
El isotonitazeno fue el primer nitazeno no sometido a fiscalización internacional (en ese momento) notificado al Sistema de Alerta Temprana sobre Nuevas Sustancias Psicoactivas (SAT) de UNODC.
Desde ese primer informe en 2019, el número de nitazenos notificados ha aumentado significativamente, pasando de una sustancia en 2019 a 13 nitazenos diferentes en 2023, algunos de los cuales son muy potentes.
Hasta febrero de 2024, se han notificado nitazenos procedentes de América del Norte, América del Sur, Asia, Europa y Oceanía.
Hay indicios claros de una rápida aparición y propagación de los nitazenos:
- Desde 2021, el número de nitazenos únicos notificados por los países europeos ha sido cada año superior al número de análogos del fentanilo únicos.
- Mientras que América del Norte sigue notificando números elevados de análogos únicos del fentanilo, el número de nitazenos únicos identificados es similar al de Europa.
- Los países que informan los números más altos de nitazenos únicos, en orden descendente, son los Estados Unidos, Canadá, Letonia, Estonia, el Reino Unido, Suecia y Alemania.
- Desde 2019, los nitazenos notificados con mayor frecuencia incluyen isotonitazeno, metonitazeno, protonitazeno, etonitazepynay etazeno, que desde entonces están bajo control internacional.
- Los nitazenos también se han notificado en casos de toxicología.
- Desde 2019, se han notificado al SAT de UNODC 179 casos de toxicología relacionados con nitazenos (hombres n=135, mujeres n=43, n=1 desconocido), el 89% de ellos relacionados con casos post mortem.
- De todos los casos relacionados con nitazenos, en 27 casos, un nitazeno fue la única sustancia notificada y evaluada como causal o contribuyente al resultado negativo para la salud.
Nitazeno sus efectos nocivos en algunos países
Los nitazenos se han vendido en preparados que se parecen a la heroína callejera o en Internet como «heroína sintética«, y también han aparecido en comprimidos vendidos de forma fraudulenta como opioides medicinales u otros medicamentos.
También hay informes de mezclas para fumar adulteradas con nitazenos.
Estas drogas se han relacionado con un aumento de las muertes inducidas por drogas en Estonia y Letonia en 2023, donde ahora representan una parte significativa de las muertes por sobredosis. También se han notificado brotes de intoxicación localizada en Irlanda y Francia en 2023.
En Irlanda, los nitazenos se vendieron de forma fraudulenta como heroína, lo que provocó múltiples sobredosis, y también se relacionaron con sobredosis en dos prisiones en 2024.
Fuera de la Unión Europea, los nitazenos se han relacionado con sobredosis de drogas en Australia, América del Norte y el Reino Unido.
Estas drogas actualmente no figuran de forma destacada en los datos rutinarios disponibles a nivel de la UE.
Sin embargo, debido a su alta potencia y novedad, existe la preocupación de que los opioides de nitazeno no se detecten de manera rutinaria en los procedimientos que se utilizan habitualmente para la toxicología post mortem.
Esto plantea la posibilidad de que el número de muertes o intoxicaciones no fatales atribuidas a estas sustancias podría ser una subestimación.
Estos avances se producen en el contexto de otras señales recientes de cambios preocupantes en el mercado de opioides en Europa.
Entre ellas, la aparición en 2021 de la «tranq-dope«, en la que se mezclan opioides sintéticos con el sedante y analgésico animal xilacina, y la «benzo-dope» en 2022, en la que se mezclan opioides sintéticos con nuevas benzodiazepinas (como el bromazolam).
Estas mezclas se encuentran comúnmente en algunas partes de América del Norte, donde se han asociado con una variedad de problemas de salud.