Los retiros psicodélicos parecen formar parte de una amplia gama de prácticas e intervenciones relacionadas con los psicodélicos que existen actualmente en Europa.
Se dice que estas prácticas van desde eventos naturalistas/espirituales (que parecen ser habituales en los retiros psicodélicos) hasta intervenciones que imitan la terapia asistida por psicodélicos utilizada en algunos ensayos clínicos.
En concreto, los retiros psicodélicos parecen ser experiencias estructuradas y guiadas en las que grupos de personas participan en el consumo de sustancias psicodélicas, como la psilocibina (‘hongos mágicos’), el LSD, la DMT (ayahuasca), la ketamina y el MDMA (éxtasis).
Se dice que tienen lugar en la naturaleza o en instalaciones especialmente diseñadas, dirigidos por facilitadores o guías, y pueden durar uno o varios días.
Los objetivos principales de los retiros psicodélicos parecen girar en torno a fines terapéuticos, espirituales o de autodesarrollo.
Se dice que algunos retiros psicodélicos legales funcionan en los Países Bajos, aunque en otros Estados miembros de la UE parecen no tener licencia o ser ilegales.
Psicodélicos riesgos del consumo
Los riesgos de usar psicodélicos dependen de varios factores, como la sustancia (incluida la dosis, la potencia/pureza y la presencia de adulterantes), los patrones y los entornos de uso, por ejemplo, si se relaciona con patrones de uso recreativo o con fines terapéuticos no regulados.
Por ejemplo, existen riesgos bien documentados relacionados con los patrones recreativos de consumo de MDMA, incluidas intoxicaciones agudas y muertes, en parte debido a la presencia de pastillas de éxtasis con un alto contenido de MDMA y en parte debido a la adulteración de las pastillas de éxtasis con otras sustancias nocivas (EMCDDA, 2023; Trimbos-instituut, 2023).
La ketamina se ha vinculado a diversos daños agudos y crónicos dependientes de la dosis, incluida la toxicidad neurológica y cardiovascular, problemas de salud mental y complicaciones urológicas, como daño a la vejiga por el consumo intensivo o la presencia de adulterantes.
Como ocurre con todas las drogas sintéticas, existen riesgos inherentes relacionados con la potencia y la pureza cuando se utilizan en entornos recreativos, incluidos los riesgos de consumir sustancias que han sido mal etiquetadas o vendidas de forma fraudulenta.
En el contexto de la psicoterapia asistida con psicodélicos, parece haber riesgos únicos relacionados con la vulnerabilidad del consumidor cuando experimenta un «estado alterado de conciencia».
En concreto, la investigación ha puesto de relieve la mayor vulnerabilidad de los pacientes, el potencial desequilibrio de poder entre pacientes y médicos y los consiguientes riesgos de daño o abuso dentro del tratamiento, debido a los efectos de las propias sustancias combinados con las modalidades psicoterapéuticas empleadas (McNamee et al., 2023; Meikle et al., 2024).
Estos riesgos particulares pueden verse acentuados en entornos sin licencia o ilegales (por ejemplo, «retiros psicodélicos»), donde dichas sustancias se consumen para intervenciones de bienestar, terapéuticas o de orientación espiritual, en ausencia de profesionales médicos capacitados o regulados.
En el contexto de la investigación clínica con psicodélicos, se han reportado algunos eventos adversos.
Psicodélicos nuevas investigaciones
Desde el 2010, se han producido en el campo médico ensayos clínicos y otros estudios que involucran sustancias psicodélicas tanto clásicas como atípicas para trastornos de salud mental específicos, en particular aquellos que son resistentes al tratamiento convencional.
- La (es)ketamina, la psilocibina, la MDMA, la DMT y el LSD han sido las sustancias que se han probado con más frecuencia.
- La psilocibina, por ejemplo, se ha probado en el tratamiento de la depresión (en particular la depresión resistente al tratamiento y el trastorno depresivo mayor), el trastorno obsesivo compulsivo, los trastornos alimentarios y los trastornos por consumo de nicotina y alcohol.
- Los ensayos clínicos realizados con MDMA se han centrado principalmente en el tratamiento del trastorno de estrés postraumático (TEPT), el trastorno por consumo de alcohol y los síntomas de ansiedad social en pacientes con trastorno del espectro autista.
- Mientras tanto, el LSD se ha probado para tratar la ansiedad al final de la vida y los trastornos relacionados con las sustancias.
Según los datos disponibles de estos ensayos clínicos, algunos psicodélicos han demostrado ser prometedores para aliviar síntomas específicos asociados con trastornos neuropsiquiátricos difíciles de tratar.
Acceso al uso médico
Hasta ahora, la regulación formal del uso médico de los psicodélicos se ha producido principalmente fuera de Europa, como en Estados Unidos y Australia.
Por ejemplo, los estados de Colorado y Oregón han regulado alguna forma de acceso a terapias asistidas con psicodélicos (Colorado General Assembly, 2023; Oregon Health Authority, nd).
En Australia, la Administración de Productos Terapéuticos anunció en febrero de 2023 que los psiquiatras podrán recetar MDMA para el trastorno de estrés postraumático y psilocibina para la depresión resistente al tratamiento a partir del 1 de julio de 2023 (Therapeutic Goods Administration, nd).
En los Estados miembros de la UE no se han introducido cambios legislativos similares, pero sí se han producido algunos avances en la financiación de los ensayos con psicodélicos en la UE.
En Chequia, por ejemplo, el Plan de Acción sobre Drogas 2023-2025 ha destinado fondos a la investigación con psicodélicos en el tratamiento de las adicciones (Oficina del Gobierno de la República Checa, 2023).
A nivel de la UE, a principios del 2024, el programa Horizonte Europa concedió 6,5 millones de euros en financiación para la investigación de terapias psicodélicas para trastornos mentales resistentes al tratamiento en cuidados paliativos (Eccles, 2024).
Disponibilidad para tratamiento
Hasta el 2024, ningún mecanismo regulador a nivel de los Estados miembros o de la UE ha aprobado ningún psicodélico clásico para el tratamiento médico de los trastornos neuropsiquiátricos.
Sin embargo, se ha aprobado un psicodélico atípico, concretamente la esketamina o Spravato, que ha recibido autorización de comercialización para adultos con depresión grave resistente al tratamiento (EMA, 2024).
Aparte de esta excepción, la Agencia Europea de Medicamentos no ha evaluado ninguna autorización de comercialización de un medicamento psicodélico para su uso en pacientes en la UE.
Por otra parte, parece haber habido un aumento del uso no indicado en la etiqueta de la ketamina (Wilkinson et al., 2017) (aprobada para su uso como anestésico en varios Estados miembros de la UE) en el tratamiento de la depresión y otros diagnósticos en algunos entornos clínicos de toda Europa.
El uso «no indicado en la etiqueta» de un medicamento es la aplicación de un medicamento para una indicación que no ha sido aprobada, o en un grupo de edad, dosis o vía de administración diferentes de lo que ha sido aprobado.
La psilocibina, ha completado los estudios de fase 2 para la depresión resistente al tratamiento, y el MDMA, ha completado los estudios de fase 3 para el trastorno de estrés postraumático.
Debido a la limitada información que existe actualmente en este ámbito, la Agencia Europea de Medicamentos (EUDA, antigua OEDT) ha puesto en marcha un proyecto para aumentar nuestra comprensión de los avances clave y responder a las preocupaciones planteadas por los responsables de las políticas.