Uno de cada cuatro adultos sufrirá un accidente cerebrovascular en algún momento de su vida, lo que lo convierte en la principal causa de discapacidad y muerte en todo el mundo.
Cada minuto no tratado después de un derrame cerebral le cuesta al paciente casi 2 millones de neuronas, lo que equivale a una pérdida que normalmente ocurriría durante tres años y medio de envejecimiento natural.
El dispositivo de imágenes portátil facilita la obtención rápida de imágenes del cerebro, eliminando la necesidad de transportar a los pacientes a un departamento de radiología, un proceso que puede llevar mucho tiempo, incluso cuando el paciente ya está en un hospital.
EMVision Medical Devices (Sydney, Australia) ha desarrollado un dispositivo móvil de imágenes cerebrales que tiene forma de casco. Es el primer dispositivo de imágenes electromagnéticas de cerebro del mundo, que realiza fácilmente imágenes del paciente.
La empresa se ha fijado el objetivo de reducir drásticamente el número de personas que mueren o quedan discapacitadas a causa de un ACV y fue seleccionada como la principal innovadora en la categoría de salud en la lista de empresas más innovadoras de AFR BOSS del 2023.
Aproximadamente del tamaño de una máquina de ultrasonido estándar, el dispositivo está diseñado para moverse fácilmente hasta la cabecera del paciente sobre ruedas.
El dispositivo permite tomar imágenes médicas en hospitales regionales y luego enviarlas a especialistas en accidentes cerebrovasculares, a través de telesalud para su diagnóstico y una orientación sobre el tratamiento. Esto es particularmente beneficioso para pacientes en áreas remotas, lejos de los departamentos de radiología.
Además, EMVision comenzará las pruebas el próximo año para un modelo más compacto de este dispositivo.
Este dispositivo ultraligero está diseñado para su uso en ambulancias aéreas y de carretera, para brindar diagnóstico y atención prehospitalaria de accidentes cerebrovasculares, independientemente de su ubicación.
Un modelo aún más pequeño del dispositivo, que originalmente fue una creación de investigadores de la Universidad de Queensland, Brisbane, Australia, está diseñado para instalarse en ambulancias aéreas y de carretera.
Por otra parte, los resultados de una unidad móvil de accidentes cerebrovasculares en Melbourne, Australia, son alentadores.
Allí se despliega un camión de accidentes cerebrovasculares para atender a presuntas víctimas de ACV que viven en un radio de 40 kilómetros del Hospital Royal Melbourne.
Los datos muestran que el camión es capaz de diagnosticar y tratar a un tercio de los pacientes que atiende dentro de la primera hora crítica después de sufrir un derrame cerebral, frente al 3 por ciento de los pacientes atendidos por una ambulancia.
En Buenos Aires, República Argentina, el Dr. Pedro Lylyk, titular del “Instituto ENERI-Clínica La Sagrada Familia”, hace más de diez años, habilitó una “Unidad Móvil de Rescate Cerebral”, con el mismo fin y excelentes resultados.
El escáner de casco de segunda generación tiene como objetivo llenar los vacíos existentes en las imágenes cerebrales tanto de cabecera del paciente como de emergencia.
Con un peso de menos de 22 libras, el dispositivo se puede transportar al punto de atención en una mochila. Cuenta con una matriz 3D de 28 antenas diseñada para escanear todo el cerebro de una sola vez. Una membrana de silicona, con un medio de acoplamiento, conecta las antenas a la cabeza del paciente.
Los tratamientos efectivos disponibles son urgentes y requieren primero imágenes cerebrales.
La capacidad de distinguir el tipo, el tamaño, la gravedad y la ubicación del ACV de manera oportuna es crucial para permitir un tratamiento.
La identificación rápida del tipo de ACV impulsada por IA acelera el tratamiento adecuado para conservar mejor la materia cerebral.
Las imágenes EMV se obtienen infiriendo las propiedades eléctricas de los tejidos, basándose en sus complejas y diferentes interacciones con ondas electromagnéticas en el espectro de 0,5 a 2 GHz.
Los algoritmos aprovechan las diferencias claras en las propiedades eléctricas de los tejidos afectados por la isquemia y el ACV hemorrágico para determinar el tipo de ACV .
El evento isquémico se codifica en color azul y el hemorrágico en rojo.
Los pacientes con accidente cerebrovascular isquémico pueden beneficiarse de los medicamentos para disolver y recuperar coágulos.
Se están realizando múltiples ensayos de investigación y la compañía planea lanzar el dispositivo al mercado una vez que se finalicen los resultados del estudio en el 2024-25.
La tecnología EM Vision abre la puerta a un diagnóstico más temprano y mejor tratamiento, en la cabecera de la cama de los pacientes.